Sí. Sin duda la informática nos produce y nos conduce a diferentes estados anímicos.
La desconfianza
-¿Pero quieres decir que esta maquina no me va hacer perder más tiempo que si lo hiciera como siempre?
La curiosidad, sorpresa…
-Mmmm! Pues no está tan mal no….
El entusiasmo
-Aaah! Este programa que me he bajado es genial!
Amor
-¡Ay! que haría sin mi ordenador.
Desilusión
-No funciona tan bien como antes…, se cuelga. Cada vez va más lento, ¿tendrá algún virus?..
Temor, horror..
-Yo no he sido.
Furia
-PAAAAM! CRAAACK! PSSSH! BOING!
Frustación
¡Juro que yo no he sido! Lo juro.... Con todo lo que ya tenía hecho…
Final
¿Servicio técnico dígame?
(…..)
-¿Ha probado de reiniciar su ordenador?
......
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